domingo, 29 de marzo de 2015

El tierno roedor chino que esta a punto de extinguirse y es sensación en internet

El tierno roedor chino que esta a punto de extinguirse y es sensación en internet

Ili Piki
El Ili Piki fue descubierto en China en 1983, sin embargo no se han visto muchos ejemplares en los últimos años.
Muchos en las redes sociales están hablando del "conejo mágico" chino, el animal más tierno en peligro de extinción del que tal vez nunca haya escuchado hablar.
El conservacionista Li Weidong ha tenido una misión en los últimos 30 años de su vida: documentar y proteger del Ili Pika, un mamífero con aspecto de conejo que solo se puede encontrar en China.
Y con menos de 1.000 ejemplares, ahora son más escasos que los pandas.
La historia de los Ili Pika comienza para la ciencia en 1983 cuando Li observa el primer ejemplar y lo documenta.
El recuerda con exactitud ese momento: "Llevaba escalando cuatro horas por una montaña y cuando me detuve por un momento para recobrar el aliento, vi la sombra de un pequeño animal corriendo".
Y añadió: "Me ubiqué detrás de una roca y de repente dos orejas de conejo surgieron de una de las piedras que estaban allí. Ese pequeño animal me miraba fijamente. Pensé que era la criatura más hermosa y bizarra que jamás había visto. No podía creerlo".
En ese tiempo, Li estaba trabajando en la prevención de enfermedades. No estaba en la búsqueda de una nueva especie.
Ili Piki
Se estiman que quedan al menos 1.000 Ili Piki en China.
Hay muchas clases de pikas –un mamífero de menor tamaño, parecido al conejo, pero con orejas más redondas- pero a diferencia de estos, el que había visto Li tenía tres rayas marrones distintivas en su cuello.
Después de tres años de investigación, Li y su equipo nombraron al nuevo animal como Ili Pika, que es el nombre de la región donde fue hallado, la prefectura de Ili en el oeste de China, en la provincia de Xinjiang.

Nuevo peligro

La Ochotona iliensis –nombre científico- vive en huecos hechos entre la tierra a una altura entre 2.800 metros y 4.000 metros.
Allí ha logrado vivir en condiciones de frío extremo y alimentándose de las hierbas que halla en las montañas de Tian Shan.
Después de su descubrimiento, Li y sus compañeros conservacionistas decidieron tomar medidas para proteger los pikas. Pero tampoco desean hacer publicidad de eso.
Ellos piensan que es mejor dejar a los pikas tranquilos en su hábitat natural.
Aunque es la presa natural de algunas aves y zorros, el Ili Pika enfrenta una nueva amenaza.
En los últimos años, su entorno natural se ha encogido en un 71%. Esto, de acuerdo a Li, se debe al cambio climático en parte y también porque su área de pastizales ha sido tomada por la creciente población alrededor de la montaña.
"Los Ili Pikas viven aislados en la parte de alta de la montaña, por lo que sus hábitats están constantemente fragmentados. Perder uno va en detrimento del grupo entero", dijo Li.
Li Weidong
Li Weidong vio por primera vez este roedor en las montañas del oeste de China.
Li dijo que vio aquel misterioso Pika un par de veces en 1990. Pero desde entonces no ha visto otro en 24 años.

Criaturas antiguas

El Ili Pika adquirió notoriedad después de que la National Geographic sacara un perfil del animal. Ahora se convirtió en un fenómeno viral, asunto que preocupa a Li.
"Mucha gente me ha escrito para decirme que quieren ayudarme a proteger los Pikas. Pero más atención significa también más peligros para ellos", señaló.
El Ili Pika es una especie antigua. Ha estado en el planeta por décadas. "No podemos permitir que desaparezca enfrente de nuestros ojos".

El país en el que uno puede escoger cuánto quiere pagar de impuesto



El país en el que uno puede escoger cuánto quiere pagar de impuesto

Carnero
Al frente del edificio amarillo de concreto, un hombre amarra un carnero a la reja. Es común: probablemente lo acaba de comprar y tiene que pasar por la oficina de impuestos antes de ir a casa.
Adentro, una fila de cajeros están sentados tras unas ventanillas de vidrio grueso. Cada uno tiene una cartera grande sobre el mostrador. Cada una es de un color distinto. A pesar de todos sus problemas y pobreza, Mali a menudo te sorprende con momentos de belleza accidental.
Pero la mirada de los cajeros se pierde en la distancia debido a la falta de actividad.
El Fondo Monetario Internacional opina que este país del occidente africano tiene el potencial de mejorar su recaudación de ingresos en un 20%, pero eso no está sucediendo aquí.
Mi misión, como contribuyente registrado, me lleva por detrás de los cajeros, a la pequeña oficina de la señora Yattara. La comparte con tres colegas, cada uno con su cartera.
También hay una computadora que se usa para imprimir el formulario de declaración de impuestos. Sin embargo, toda la información se copia en cuadernos que se almacenan apilados.

Cacería anual de contribuyentes

Aissata Yattara (atrás a la derecha) con sus colegas Kani Sissoko y Adama Fofana
Aissata Yattara (atrás a la derecha) con sus colegas Kani Sissoko y Adama Fofana.
La primera vez que conocí a Yattara, una mujer inteligente que usa anteojos, fue durante el censo anual de impuestos. En esa ocasión, todos los empleados dejan la oficina armados con portapapeles en busca de más contribuyentes en la vecindad.
Siempre hay una víctima: algún comerciante sin suerte al que le cierran la tienda para ponerlo de ejemplo frente a los otros. Este año fue un vendedor de gaseosas a quien le presentaron una cuenta por deudas tributarias de US$160, y cuando no la pudo pagar, le pusieron candados a su local.
Una semana más tarde, ofreció pagar la mitad y les dio unas cajas de bebidas de naranja a los empleados de la oficina de impuestos. Eso resolvió el problema.
Yattara me llevó a donde su jefe, el señor Kante, quien goza de una oficina entera para él. Me ofrecen un asiento, desde el cual a duras penas puedo verlo.
Libros de leyes tributarias y copias de los decretos del Ministro de Finanzas están apilados en su escritorio. Me hace unas preguntas sobre mis gastos como periodista y me incomoda el hecho de que no puedo ver qué está escribiendo.
"Puede escoger entre dos regímenes de impuesto a la renta: 30% o 3%... ¿cuál prefiere?".
"Eeehhh, pues 3%", me aventuro. "3% será", dice y añade: "Ahora vamos a ver a mijefe".
Eso no me extraña: la jerarquía lo es todo en Mali. Y supongo que es tan raro que alguien entre a este edificio y ofrezca pagar el impuesto a la renta que su jefe querrá conocerme.

Números redondos

Oficina de impuestos en Bamako
No muchos acuden a la oficina de impuestos de Bamako a ofrecer pagar lo que deben.
La oficina del señor Kantako es enorme. La reunión involucra muchas sutilezas y curiosamente se espera que yo presente la posición del gobierno británico respecto a las demandas de autodeterminación de los rebeldes taureg en el norte del país.
"Eeehhh... Reino Unido desea que reine la paz", respondo mustiamente. Toda mi energía se está yendo en tratar de reprimir mi alegría ante la idea de pagar 3% de impuesto a la renta.
El jefe le pide a Kante que le resuma mi caso. Ambos se inclinan sobre una computadora y sacan la cifra de US$380.
"Mmm... me gustaría que fuera un número más redondo", dice Kantako eventualmente. "Y la libra esterlina está fuerte. Creo que queremos US$485 (300.000 en moneda local)". Su mirada es la misma que te dan cuando uno está comprando casi cualquier cosa en Mali, como diciendo: "esa es mi oferta, ¿cuál es la suya?".
"Y lo querríamos en efectivo", agrega, "pero le daríamos un recibo".

¿Por qué es así?

Kante
Kante le explicó a la BBC las razones para ofrecer la opción de pagar más o menos impuestos.
Kante me ofrece una explicación cuando volvemos a su oficina.
"El 80% de la economía de Mali es informal. El gobierno cree que una tasa de 3% atraerá más contribuyentes. Lo que la gente no entiende es que nos cuesta trabajo conseguir siquiera el 1% o 2%, así que esta nueva tasa es un aumento".
Según eso, a las autoridades tributarias les fue muy bien conmigo.
Pero quizás el hecho de que yo ofrecí pagar voluntariamente impidió que me cobraran lo que probablemente debería pagar: el 30%.
Al salir, veo al hombre del carnero, pero se está yendo sin él.
"¡Monsieur!", lo llamo. Se da vuelta.
"¿Su carnero?".
"No, no. Se los di a ellos", dice con naturalidad, y se va.

sábado, 28 de marzo de 2015

Qué pasa cuando dejamos de escuchar música

Qué pasa cuando dejamos de escuchar música


BBC
Chica con auriculares
Dejar de escuchar música, parece, es muy difícil.
¿Es posible vivir sin música? Eso se preguntó el científico británico Trevor Cox y se propuso encontrar la respuesta durante este período en el que los cristianos guardan la cuaresma.
Los 40 días que van desde el Miércoles de Ceniza hasta Jueves Santo, según explica Catholic.net, son "un tiempo de reflexión, de penitencia, de conversión espiritual; tiempo de preparación al misterio pascual".
Y es esa penitencia la que nos ocupa, o más bien a Cox quien, en vez de hacer una sola comida fuerte al día y abstenerse de comer carne, se sometió a un ayuno musical.
Todo un reto para alguien que toca saxofón a diario y es profesor de ingeniería acústica en la Universidad de Salford. ¿Por qué hacerlo?
No por motivos religiosos, dice, sino para explorar cómo nos afecta la omnipresencia de la música en las sociedad moderna.
Estos son los primeros descubrimientos de su desafío, contados por él mismo.

1 – Mi rockola interior se disparó

Prácticamente todos oímos música dentro de nuestras cabezas. Al comienzo de este experimento yo me sentí inundado de imaginería musical.
Trevor Cox
Trevor Cox es profesor de ingeniería acústica de la Universidad de Salford, Reino Unido.
En inglés, a las melodías repetitivas que se quedan "pegadas" en el cerebro se les llama "earworms" (parásitos de oído), y las mías son una mezcla estrafalaria que incluye el tema de la película Airplane!("¡Aterriza como puedas!"), Eine kleine Nachtmusik (pequeña serenata nocturna) de Mozart y fragmentos de la música de saxofón que suelo tocar.
Este bombardeo interior de melodías pegadizas se mantuvo durante los primeros días del ayuno y luego se calmó gradualmente hasta estabilizarse en algo más normal.
Victoria Williamson, experta en psicología de la música de la Universidad de Sheffield, Reino Unido, me contó que algunas personas que hacen retiros de silencio tienen una reacción similar.
Cuando eliminé la música de mi vida, mi cerebro lo compensó creando una imaginería musical excesiva.

2 – Deseaba desesperadamente tararear y cantar

Durante los primeros días, tuve que esforzarme para no cantar mi música interior, especialmente con semejante remolino de melodías en mi cabeza.
Mientras andaba en bicicleta por Salford o hacía cosas en casa, mientras escribía en mi oficina… A lo largo del día estaba desesperado por externalizar el sonido.
En un momento en que dejé escapar unas notas accidentalmente, también percibí cuánto más placentero era que sólo imaginar la melodía en mi cabeza.
Músico con saxofón
Cox encontró música en todas partes.
Boris Kleber y sus colegas han investigado la diferencia entre el canto imaginado y el manifiesto.
Para ello le pidieron a cantantes clásicos que interpretaran la primera línea del aria de bel canto "Caro Mio Ben" de Tommaso Giordani en un tomógrafo.
Y observaron varias diferencias en las áreas del cerebro que se activaban dependiendo de si los sujetos imaginaban o realmente cantaban la canción.
Mi sospecha es que esas pocas notas vocalizadas me parecieron más agradables porque el estímulo musical es más potente al involucrar más partes del cuerpo.

3 – Hay gente a la que no le gusta la música

Después de una semana sin música comencé a sentirme muy cansado y aburrido.
La razón podría ser que me estaba perdiendo la capacidad que tiene la música para estimular los centros cerebrales de placer.
Hay personas, sin embargo, que no parecen sentir el mismo efecto cuando escuchan una melodía, aunque puedan oírla y percibirla perfectamente.
Un estudio de la Universidad de Barcelona publicado el año pasado llegó a la conclusión de que hay gente que no disfruta de la música.
Los investigadores le pusieron un nombre a esta condición: anhedonia musical.
En una parte del estudio los científicos les hicieron oír piezas musicales a los participantes y en otra los hicieron jugar un juego que tenía recompensas económicas.
Así observaron que las personas con anhedonia musical obtenían placer del juego pero no de la música, lo que indica diferencias en la forma en que se accede a los centros del placer del cerebro en comparación con la mayoría de la gente.

4 – La única forma de evitarla del todo es ser un ermitaño

Es imposible evitar la música por completo y llevar una vida normal.
Durante mi ayuno escuché por todas partes fragmentos de canciones que se colaban desde los auriculares de las personas que me cruzaba en la calle, de la música que salía de las tiendas y del sonido distante de mis hijos practicando sus instrumentos.
Los tapones de oídos pueden detener algo del sonido, no son del todo efectivos cuando la música suena demasiado fuerte.
Chica oyendo su reporductor de mp3
En su experimento, Cox oía una grabación de ruido para aislarse la música exterior.
Para resolver este problema llevo en mi reproductor de mp3 una grabación de ruido estruendoso. Este sonido es muy eficaz si se oye con auriculares internos.
Pero la única manera de no escuchar ni el más mínimo fragmento de música sería oír este ruido todo el día, algo que imita de forma alarmante las técnicas de privación sensoriales por las que la CIA ha sido cuestionada.
Así que si alguien quiere hacer un experimento que incluya no escuchar nada de música, deberá encontrar un remoto espacio de reclusión y desconectarse de toda la tecnología.

5 – La música es tan ubicua que se ignora fácilmente

He entrado en cafés y en áreas de recepción de distintas oficinas y a veces me ha tomado varios minutos notar que sonaba música.
No tenemos párpados en los oídos y no hay un equivalente auditivo a apartar la mirada.
Nuestro sistema auditivo está constantemente recogiendo sonidos y nuestro cerebro tiene que decidir cuáles son importantes y merecen atención y cuáles pueden ser ignorados sin peligro.
Algo ruidoso y abrupto, como el chillido de los frenos de un automóvil, capta la atención inmediatamente para que podamos luchar o huir.
Cuando escuchamos algo menos amenazante, como un sutil fondo musical, nuestro cerebro decide si deberíamos percibirlo de forma consciente o no.
A menudo la música suena tan baja en los lugares públicos que si yo estaba concentrado en otra cosa –como en qué sándwich comprar en un café– mi cerebro no la registraba.
Cuando me daba cuenta, tenía que irme a toda velocidad.

sábado, 21 de marzo de 2015

¿Cómo saber si estás enamorado? Hazte un escaneo cerebral

¿Cómo saber si estás enamorado? Hazte un escaneo cerebral

Estudio realizó resonancias magnéticas funcionales a 100 jóvenes para analizar la relación entre el cerebro y el amor

(Foto: Getty Images)

¿Es amor lo que sientes por tu pareja o es simplemente una ilusión pasajera? Puede que un futuro sólo bastará con ir al médico y hacer un par de pruebas al cerebro para responder esa pregunta.

Aunque suene extraño y un poco ridículo, un grupo de científicos de la Universidad de Ciencia y Tecnología de China y la Escuela de Medicinal del Monte Sinaí (EE.UU.) han realizado y analizado resonancias magnéticas funcionales (IRMf) a los cerebro de voluntarios enamorados. Los resultados fueron prometedores.

El estudio, publicado en la revista Frontiers in Human Neuroscience, analizó el cerebro de 100 estudiantes que rondaban los 18 años. Los voluntarios fueron divididos en tres grupos: aquellos que se encontraban completamente enamorados, los que acababan de terminar una relación y los que jamás se habían enamorado. Cabe resaltar que entre los sujetos de prueba no había grandes diferencias en educación e ingresos económicos.

LG: enamorados. SG: solteros. ELG: terminaron recientemente una relación. (Foto: Frontiers in Human Neuroscience)

Luego de realizarse las resonancias, se calculó la homogeneidad regional (ReHo) y la conectividad funcional (FC) del cerebro, con el objetivo de investigar la actividad cerebral relacionada con el amor y enamoramiento.

Los resultados demostraron que los voluntarios enamorados presentaron una mayor actividad en varias regiones del cerebro, especialmente en las que participan en los procesos de recompensa, motivación, emociones y el comportamiento social.

Asimismo, se demostró que las personas que tenían un mayor tiempo de relación con sus parejas presentaban una mayor actividad cerebral en las áreas ya mencionadas.

Los expertos afirman que el estudio proporciona la primera evidencia empírica de alteraciones en la arquitectura funcional del cerebro debido al amor. Además, señala que es posible utilizar IRMf para la investigación del amor romántico. Sin embargo, aún es necesario más análisis y evaluaciones para comprobar sus hipótesis.

Fuente: IFL Science, Frontiers in Human Neuroscience

Cosas curiosas de los deportes más peligrosos

Cosas curiosas de los deportes más peligrosos

Lo más peligroso en el mundo es intentar cruzar un abismo en dos saltos.
David Lloyd George, político británico (1863-1945)
¿De dónde viene el puenting?
El puenting o Bunjee Jumping fue inventado por el británico David Kirke y tres amigos en 1979, en el puente colgante de Clifton, en Bristol, Reino Unido.
Pero tiene un precursor, no elástico, conocido como clavadismo terrestre.
Este es un ritual originario de la isla de Pentecostés, en Vanuatu, que consiste en saltar desde una torre de madera atado a una liana.
Pero sólo se conoce un accidente fatal, casualmente presenciado por la reina Isabel de Inglaterra en 1974.
La causa más común de accidentes durante el Bungee jumping, por su parte, es el empleo de una cuerda demasiado larga.
Y es que al calcular la longitud de la caída es fundamental tener en cuenta que esta no se ralentiza cuando se alcanza la extensión máxima de la soga medida antes de estirararse.
Antes bien, se continúa acelerando, porque la resistencia a la distorsión es cero en la longitud natural y se incrementa gradualmente después.
La razón: a la cuerda le toma un tiempo equilibrar el peso del saltador.

Los riesgos de la lucha de cometas

Cometas en Lahore, Pakistán
Miles de cometas participan del Festival Basant de Lahore.
En Lahore, Pakistán, la capital mundial de las cometas, se practica un deporte tan peligroso que solo está permitido durante 15 días del año.
Y, de hecho, hay una organización que pide que se le prohíba del todo: el Comité de Afectados por Cometas.
Los participantes usan sus artefactos voladores para luchar en duelos aéreos y la idea es que la propia cometa corte la cuerda de l del rival.
Los cordeles están hechos de metal cubierto de vidrio abrasivo y como consecuencia hay frecuentes cortes de luz cuando los cometas chocan con cables eléctricos.
Pero también han causado heridas a personas, particularmente a motociclistas que se han cortado la garganta con cuerdas colgadas sobre la calle.
Cables de cometas en Lahore, Pakistán
Las cuerdas metálicas de las cometas en Lahore dan lugar a muchos accidentes.
Otros incidentes incluyen caídas desde techos o en medio del tráfico cuando los participantes que hacen volar sus cometas no miran hacia donde van.
Durante este juego, cuando una cometa es derribada por otra se grita "¡Bo Kata!" (cometa abajo), y suenan los tambores.

Lesiones inesperadas

El cheerleading o animación

es la causa número

1
  • de lesiones graves deportivas de mujeres en Estados Unidos

Desafíos inusuales

Algunos de los deportes de riesgo más extravagantes incluyen:
  • Plancha extrema: como su nombre indica, se trata de planchar en los entornos menos menos apropiados para tal tarea, como cumbres de montañas, en el aire con paracaídas, etc.
  • Croquet extremo: con la misma lógica, el inofensivo juego de jardín se traslada a escenarios mucho más salvajes e irregulares para hacerlo más...¿entretenido?
  • Pogo extremo: se realizan piruetas y acrobacias utilizando un dispositivo para saltar con ayuda de un resorte conocido como pogo saltarín, que que se compone de un bastón con una asa para sujetarse por arriba y soportes para poner los pies.
Plancha extrema
Hasta las tareas domésticas pueden convertirse en un deporte extremo.

Una de toreros

Las corridas de toros no son un deporte. Son una tragedia y simbolizan la lucha entre el hombre y las bestias.
Ernest Hemingway. (1899-1961)